Siempre nos causa una cierta nostalgia cambiar de país. Cuando ya estamos acostumbrados a las maneras de hacer, hablar y disfrutamos de la gastronomía, llega el momento de marcharse. Con Perú no solo no era distinto, si no que nos costaba más de lo habitual. Dos meses nos ha tenido enganchado este país y sinceramente nos sentimos muy a gusto aquí.
Nuestros últimos pasos, por el sur del país, nos condujeron a Arequipa y más tarde a Puno. Dos ciudades importantes dentro del país.
Una de ellas nos gustó por su belleza y tranquilidad y la otra por estar a orillas del lago más grande a mayor altitud del mundo, el Lago Titicaca.
Arequipa es sencillamente bonita y tranquila. Pero si por algo destaca, y todo el mundo nos lo remarcó mucho antes de llegar, es por su gastronomía. Coincidiendo con el cumpleaños de uno de nosotros, Sonia, nos permitimos probar todo aquello que nos apeteciera. Fuimos en busca de los clásicos: Rocoto relleno, Pastel de papas y el Queso helado. El mejor lugar para degustar los platos es el mercado y en Arequipa no es diferente. No fue difícil encontrar un lugar para llenar la barriga, y casi sin quererlo, encontramos una señora que hacía más de 50 años que preparaba uno de los postres más emblemáticos del lugar. El queso helado fue un descubrimiento para nosotros. No tiene mucho secreto, y creemos que es en su sencillez donde guarda toda la esencia. ¡Riquísimo!
Nos acercábamos a la frontera con Bolivia y nuestra última parada iba a ser en Puno, la ciudad que está a orillas del Lago Titicaca. Puno es una ciudad más dentro del país, pero tiene uno de los lagos más importantes y a mayor altura de América del Sur, también compartido por su país vecino, Bolivia. La visita estrella es navegar el río y ver los pueblos de los Uros flotar en pleno lago. También se pueden visitar las islas Amantaní y Taquile, y pernoctar en ellas. Todo adquiere un punto ficticio, una puesta en escena para los turistas. La autenticidad de éstos pueblos se ha ido perdiendo poco a poco con la llega de la modernidad, nos contaba el barquero. Y es normal, las condiciones de vida han mejorado y estos pueblos conocen los tiempos modernos, reciben turistas a mansalva y no quieren perder la oportunidad de mejorar o ingresar más.
Con este ponemos punto y un hasta pronto a uno de los países más completos que hemos conocido. Las experiencias vividas, las nuevas amistades y los momentos tan bonitos que hemos vivido han hecho de Perú un país formidable.
¡Nos vamos hacía Bolivia, hasta pronto Perú!
4 comentarios
Pues nada a seguiros por Bolivia……..y ya le diré a mi yerno que Perú os a gustado 😉
Hola Miguel,
Dile a tu yerno que nos ha gustado, que nos ha fascinado, encantado… ¡Tiene un país precioso y lo mejor sus gentes!
Alberto y Sonia
Continuaremos vuestro viaje acompañándoos en todos los momentos que vosotros queráis compatir. Hasta ahora nos está encantando. Perú, fantástico.
Gracias ecano! Por estas tierras de América tenemos un buen trozo de nuestra historia. Es magnifico ver que a miles de kilómetros, en la otra parte del océano Atlántico hayan tantas cosas que nos asemejen y que nos podamos sentir tan identificados.