Acabada nuestra etapa en Koh Lanta, y con el afán de visitar otras islas de la Costa de Andaman, nos dirigimos a Koh Phi Phi Don. Está entre las islas más conocidas de Tailandia ya que su isla hermana Koh Phi Phi Leh fue la protagonista de una película norteamericana protagonizada por Leonardo DiCaprio, como no, hablamos de La Playa.

Así que llegamos a Koh Phi Phi Don sabiendo que no iba a ser solitaria ni tranquila, y aún menos barata. A nuestra llegada corroboramos la idea con la que habíamos partido hacia ésta isla, nos encontramos rodeados de agencias ofertando el mejor trayecto hasta otra de las tantas islas, bakerys con un completísimo surtido de bollería, pizzerías, restaurantes y bares que te transportan hasta el mismísimo corazón de Khao San Road, incluso si lo deseas puedes disfrutar de un combate de Muay Thai exclusivo.

Llegando a Koh Phi Phi Don
Llegando a Koh Phi Phi Don

Koh Phi Phi Don no es muy grande, pero en Ton Sai Village puedes encontrar todo lo que necesites y más. En éste reducido espacio se amontonan los diferentes servicios.

Una vez desembarcados recorrimos la isla en busca de un alojamiento que se ajustara a nuestro presupuesto. Encontrado, duchita y a recorrer las calles a ver que se cuece. La isla ofrece, entre sus atractivos, inmersiones, excursiones a las islas de alrededor y poca cosa más, así que poco tiempo íbamos a pasar aquí.

Desembarcando del ferry
Desembarcando del ferry

Nuestra idea es visitar en el día la isla de Koh Phi Phi Leh y subir hasta algún punto de la isla Phi Phi Don para admirar la belleza de ésta. Así que por la mañana madrugamos y una caminata de menos de una hora nos llevaría hasta el view point de la isla, lo que también nos permitió ver otra cara, la isla arrancando motores para un nuevo día sin rastro de turistas.

Despertar en Ton Sai Village
Despertar en Ton Sai Village
View point
View point

Llegamos al punto de encuentro para salir hacía Ko Phi Phi Leh con otros tantos como nosotros. Primera parada, Monkey Beach, los monos que curiosamente no parecen extrañarse de nuestra llegada. La playa muy bonita, arena blanca y agua transparente, pero lo que más nos llama la atención son la cantidad de restos que acumulan los monos de su motín. Más tarde ponemos rumbo a Koh Phi Phi Leh, concretamente a  Maya beach, famosa por la película y la cual pertenece al parque natural. La playa en sí no la hemos podido apreciar en su magnitud debido a las hordas de turistas que llegan por minuto, pero hay que reconocer la belleza del lugar. La visita sigue con unas paradas en diferentes calas para hacer algo de snorkel y ver pececitos, lo que nos ha parecido más divertido.

Partiendo hacia Koh Phi Phi Leh
Partiendo hacia Koh Phi Phi Leh
Koh Phi Phi Leh
Koh Phi Phi Leh
En remojo en Maya Beach
En remojo en Maya Beach
Un poco de snorkel
Un poco de snorkel
Acabando la visita
Acabando la visita

De vuelta a Koh Phi Phi Don nos dirigimos al hostel donde teníamos las mochilas y corriendo a coger el ferry que nos llevaría hasta nuestra siguiente parada.